El Diálogo Transatlántico de Consumidores (TACD por sus siglas en inglés), una coalición de las principales organizaciones de consumidores a ambos lados del Atlántico, publica hoy un informe que expone las graves deficiencias en el cumplimiento de la normativa de seguridad en las principales plataformas de compra online.
El informe muestra como el crecimiento exponencial del comercio electrónico ha incrementado la disponibilidad de productos, pero también expone a las personas consumidoras a productos domésticos peligrosos. Al contrario que los comercios tradicionales, las plataformas online a menudo eluden una responsabilidad legal clara. Esto permite la llegada de productos peligrosos e incluso ilegales hasta los consumidores, especialmente de vendedores internacionales, sin un mínimo de supervisión.
Léa Auffret, directora del TACD afirmó “Este informe envía un mensaje claro: se están colando muchos productos inseguros a través de las rendijas legales de las plataformas en línea. Las personas consumidoras de la UE, Reino Unido y EEUU se merecen mayores garantías independientemente de dónde realicen sus compras.”
“Las personas consumidoras esperan que los productos que compran en línea sean seguros, pero este informe pone en evidencia que los mercados online siguen siendo una jungla donde los productos peligrosos e incluso ilegales están tan solo a un click de distancia.” añadió Courtney Griffin, directora de Seguridad de los Productos en la Federación Norteamericana de Consumidores. “Es el momento de que las autoridades den un paso al frente, cierren los agujeros legislativos y hagan que estas plataformas asuman su responsabilidad de proteger a los consumidores.”
Las principales conclusiones del informe recogen investigaciones realizadas en la UE, Reino Unido y EEUU que han descubierto lo extendidos que están los productos inseguros en los mercados de compra online. Entre estos productos se incluyen aparatos electrónicos como mantas eléctricas, radiadores y cargadores de teléfonos móviles, que presentan riesgos graves de descarga eléctrica e incendio. También detectores de humo y de monóxido de carbono que no se activan, o productos infantiles que contienen niveles peligrosos de plomo o ftalatos.
A pesar de las advertencias y la todavía escasa implementación de la legislación, los productos inseguros y las falsificaciones siguen estando disponibles en el mercado, planteando riesgos severos y afectando a la confianza de las personas consumidoras.
David Sánchez Carpio, director de la Federación de Consumidores y Usuarios CECU, organización miembro del TACD añadió: “La legislación ya existente es un comienzo, pero necesitamos que se aplique de manera más estricta y con una mayor coordinación entre administraciones para garantizar la responsabilidad legal de las plataformas en línea. Necesitamos también una mayor cooperación a nivel internacional, así como más recursos y capacidades para que las administraciones puedan ejercer sus competencias y para fomentar la participación de las organizaciones de personas consumidoras. Solo así podremos garantizar que las personas consumidoras tengamos el mismo nivel de protección cuando compramos en una tienda física o en línea”.
El informe completo (en inglés) está disponible aquí.