La compra de perfumes falsificados conlleva graves consecuencias, tanto para nosotros como para toda la sociedad: suponen un riesgo para la salud y la seguridad de quien los usa al no existir control sobre sus ingredientes; tienen efectos negativos para la economía, promoviendo movimientos opacos y perjudicando a las empresas y al empleo que generan; inciden negativamente sobre el medioambiente, ya que no hay control alguno sobre los procesos de producción y sus desechos; y vulneran los derechos humanos, ya que su compra beneficia a grupos criminales organizados y promueve situaciones de esclavitud.
Para evitar que los consumidores adquieran involuntariamente perfumes falsificados, desde CECU recordamos algunas características de los mismos que nos ayudarán a distinguirlos de los originales:
• Envoltorio: en los perfumes originales el celofán es grueso y está bien plegado, en los falsificados suele ser fino, está mal doblado y permite la existencia de aire en su interior.
• Estuche: en un original el cartón tiene buena textura y gramaje y, si se agita, el embalaje interno impide que el frasco se mueva en su interior.
• Frasco: los originales son de una pieza. Los falsos suelen ser de dos piezas, con el riesgo de que el pegamento que las une pueda migrar al contenido, y el tubo interior del spray es muy largo, con lo que se curva en la parte inferior.
• Etiquetado: los falsificados carecen en muchas ocasiones de elementos básicos y obligatorios como el número de lote o el listado de ingredientes.
• Interior: comparándolo con el original, el perfume falso suele tener una densidad y color diferentes. Además, se elaboran en talleres clandestinos sin normas básicas de higiene.
• Precio: las falsificaciones tienen un precio anormalmente bajo, lo cual nos debe hacer sospechar. Además, no podremos pedir tique o factura, con lo que será muy difícil reclamar.
Si buscando comprar un producto original a un consumidor le venden uno falsificado puede intentar reclamar informándose en su asociación de consumidores sobre cómo hacerlo en función del lugar de la compra. Si se compra una falsificación a sabiendas de que lo es, no se podrá reclamar en ningún caso.
CECU viene desarrollando a lo largo de este año, bajo la subvención de la Secretaría de Estado de Asuntos Exteriores.
